viernes, 27 de enero de 2017




            Amor, hoy me voy a la guerra, no te preocupes por mí, ¡estaré bien sin ti! Seré un soldado de la soledad luchando en contra de tus recuerdos, un guerrero sin piedad combatiendo a toda marcha contra mis sentimientos, derramare las gotas de sangre que sean necesarias para ya no pensarte. Seré como un aventurero en busca de nuevos retos, empuñare mi arma apuntándole a mi memoria y con un último suspiro matare cada rastro de ti, solo así seré feliz.

            Es increíble como ha pasado el tiempo desde ese último día que estuve en la guerra. Mi vida ha sido otra, ya no soy el mismo, cada cosa que sentía dentro de mí se ha ido, ya no amo, ya no existen más suspiros al viento, se fue cada alegría, cada dolor, cada recuerdo, cada gesto. Hoy solo queda un gran vacío, un cuerpo lleno de vida y un alma queriendo morir, ¿cómo es posible que sin darme cuenta mate lo único que me mantenía vivo? Hoy las rosas lloran tu nombre ¡y yo aquí sin poder llorar por ti!


         Escribí, escribí esto para ti, para seguir despierto y saber que esto no es un sueño, porque me llena de alegría esta realidad en donde no sueltas mi mano al caminar. Escribí solo para no despertarte con mis palabras y con mis sonidos, con mis susurros y mis suspiros. Escribí para decirte con unas cuantas letras que no sé cuánto dura un día sin ti a mi lado pero si sé cuánto dura un instante junto a ti. Escribí para enamorarte en silencio sin mucho ruido, para contarte entre líneas cuantas estrellas se necesitan para escribir tu nombre en el cielo, para dejar a un lado estas ganas de besarte toda la noche y desvelarme en tus labios. Escribí y seguiré escribiendo hasta tener tu amor plasmado en las letras de cada párrafo de mí día a día.

jueves, 26 de enero de 2017


LLUEVE.


         Llueve, y nos hemos convertido en gotas de agua que cae sin ningún sentido, bueno, tal vez si, quizás el de adormecer nuestros cuerpos con el dolor de la caída, porque hoy con esta lluvia ha caído nuestro amor en miles de partículas. Nuestro tú y yo juntos se esfumo con el suave y leve sonido de la llovizna. Llueve, y tu aun no te das cuenta que es nuestro amor aquel que choca contra el pavimento, que es nuestro querer aquel que cayó como estrella fugaz. Llueve y hoy ya no estás para abrigar  mi corazón que ahora está sumergido en el frio de cada de agua que cae sin poder parar. Llueve, y es como si tu amor hacia mi aun durmiese y no quisiese despertar de su sueño profundo. Dime, ¿alguna vez te has preguntado del por que llueve? Pues amor te diré que eres la razón de esta tormenta que inunda mi corazón.